La noche madrileña se resiste a envolverse en el frío otoñal. Una magnífica prueba de ello fue lo vivido los días 20 y 21 de octubre en Café La Palma. Valle eléctrico es un evento formado por Yeray Dorta, Manuel Ruano y Diego Sánchez que este año cumple cinco ediciones.
Como cada año, el cartel está compuesto por artistas nacionales e internacionales de la escena underground en música electrónica, trap o hip hop entre otros muchos más estilos. Es un espacio donde la música alternativa se arriesga y va mas allá de los cánones establecidos por la radioformula.
Tras un increíble viernes donde pasaron por su escenario Jus Kno’, NOIA, Kane West, SPINEE, incluso los organizadores del evento en calidad de Dj’s, se nos presentaba un sábado de infarto.
Poco más tarde de las 20:30 se subía al escenario El Trinidad. Era una de las apuestas destacables del cartel del FIB de este año donde sorprendió a público y crítica. Él fue el encargado de romper el hielo el sábado, caldeando la sala con su energético espectáculo que va más allá del trap y de los sonidos urbanos. El madrileño es una de las promesas musicales más interesantes de la escena estatal y así lo demostró.
Aproximadamente una hora después, fue el turno de Catnapp. Artista argentina afincada en Berlín que dejó boquiabiertos a los asistentes con su magnetismo y fuerza sobre el escenario. Durante el show, presentó su EP ‘Back’, autoeditado por su propio sello Napp récords, que apenas lleva un mes en el mercado. Muy agradecida y animando a la gente a desinhibirse, cantó temas de este EP como ‘Back’ o ‘Come’ y de otros trabajos anteriores. Un estilo break-beat influenciado por artistas de diferentes géneros, hacen que Catnapp tenga un sonido tan propio y creativo.
Los canadienses Doldrums fueron los siguientes en actuar y en seguir con la estética de la noche con su característico Sub Pop con tintes de rock psicodélico. Ellos también han autoeditado su último álbum titulado ‘Esc’ y aunque tuvieron unos pequeños problemas técnicos al comenzar su show, no les impidió demostrar la garra que tienen sobre el escenario.
Para finalizar la noche, YDVST y Cnidaria prepararon un set que confirma que son unos de los mejores exponentes de Sweat Taste. Los ritmos personales de electrónica de YDVST recrean una atmósfera etérea que hizo poner la piel de gallina a los presentes. Sonidos étnicos envueltos es ese misterioso envoltorio que cada vez iba acelerando más y culminó en un poderoso Trance. Cnidaria fue el encargado de terminar el espectáculo incorporando elementos industriales y sonidos futuristas.
Y así terminó la quita edición de valle eléctrico. Una edición que nos ha dejado con unas grandiosas actuaciones y con ganas de volver el año que viene.
