Y en la segunda jornada del Truenorayo Fest nos encontramos con el grueso de las bandas, con la mayoría de puestos de autoedición (Malatesta, Mongolic Records, Rayo Dockers…) y con un par de paellas (para todos los gustos, de verduras y de carne), y por consiguiente, con más público.
La jornada abría con las DJs Hits With Tits, mientras empezaban a hacerse las paellas, y con el siempre bailongo Blutaski DJ, que puso a disposición de los presentes dosis incendiarias de punk, punk y más punk, incluyendo temas de Elástica a los White Stripes, pasando por Hanni El Khatib.
Tras él y la paella, empezaron los conciertos, comenzando para lo que fue para nosotros la sorpresa de la tarde: Kelly Kapowsky, un grupo de 5 chicas que venían directas desde Barcelona.
La voz de su frontman, Made, perfectamente entrelazada con la de Eva (también a los teclados), creaba una armonía deliciosa para esa hora de la tarde. Magníficas.
Tras ellas, llegó el turno del garage-punk con dos bandas amigas entre sí, PANE y V¡etnam (sí, es una exclamación), también desde Barcelona.
Después llegó el cachondeo madrileño de mano de Las Infantas, con su garage punk altamente enérgico, y con su frontman Phillip Stark contoneándose a placer mientras aporreaba su Korg.
A mitad de concierto hicieron subir a Sara (voz de Árida, a los que veríamos luego), para colaborar en un tema (recordemos que Javi, el batería de Árida, toca también con Las Infantas).
Cuando la noche ya coqueteaba con nosotros, llegaron Mihassan con su electro-post-pop, con unos visuales que impactaban nada más entrar a la sala.
Y entonces llegó la catarsis. El ruido. El tornado. Llegó un viento del desierto, que traía dos personas únicamente: Sara y Javi, que juntos forman Árida, grupazo de stoner que surge en los bajos fondos de Madrid. Fuerza, sabor a tierra, energía… «So fucking powerful!!!»
Increíble el ruido y la fuerza que pueden transmitir únicamente dos personas. Una vez más, la simpleza de instrumentos superó todas las expectativas.
Y el último grupo que vimos fue Ghost Transmission, donde echamos de menos la presencia de Borja Put (Siberian Wolves), que se encontraba de gira con los lobos siberianos.