Lo de Rubick y Madrid es un idilio en toda regla. Ellos mismos me han contado en más de una ocasión que han flipado tocando allí y viendo como la gente de las primeras filas enloquecía y coreaban muchas de sus canciones como si de un bolo en Wah Wah se tratase.
Este sábado volverá la locura a una sala que conocen bien, Costello, sala en la que actuaron en agosto de 2012. Junto a ellos estarán los locales Mahalo, una banda con unos referentes comunes con los valencianos ya que entre sus influencias están Arctic Monkeys, Oasis o Kasabian, por lo tanto se prevee una noche muy británica y sobretodo una noche de rock del bueno ya que damos fe de que los conciertos de Rubick son una fiesta y si encima llegan tan motivados como llegarán el sábado… Madrid va a arder. Costello será salvaje!