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lunes, mayo 6, 2024

Así fue la presentación de Space Mambo, el exótico Rythm&Blues de los Limboos

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Primer sábado de petardos y verbenas falleras, mucho ajetreo en la noche valenciana y no iba a ser menos el salón de ceremonias de 16 Toneladas.
Tras una lección de guitarra rockanrolera y audaces fusiones de saeta y western por parte del sevillano Pájaro, aterrizan los Limboos a presentarnos su espectacular primer trabajo Space Mambo; un álbum que viaja por un limbo de géneros musicales conectados por la magia del rythm&blues más crudo, puro y duro.
Contundente sonido bien definido y elaborado que a algunos nos ha llevado a considerarlos como la indudable revelación del 2014.
Y es que, la banda afincada en Madrid con un par de años de vida y un par de miembros de los Phantom Keys (garantía de calidad) han sacado a relucir sus armas en poco tiempo y con mucho entusiasmo y escenario a cuestas.
¡Comienza el show!
Se arrancan con una imparable macedonia instrumental, con mucha guitarra virtuosa y una batería bien marcada por Daniela Kennedy, la componente femenina de la banda, quien mantuvo su elegancia de porcelana con mucho ritmo, convicción y más estilo que la mismísima Twiggy.
Sin rodeos se apresuran a lanzarse con su “Early in the morning”, ese tema con el que bien saboreamos su personal sonido, que ha sido definido muy acertadamente como “exótico” rythm&blues.

Todos los miembros intervienen como imprescindibles puntos cardinales en ésta sabrosa canción con percusión caribeña por parte de Sergio Alarcón y esa ruda voz de Roi Fontoira capaz de transportarnos a un vibrante antro de Nueva Orleans.
Proceden con “Not a soul around”, donde el dúo batería-guitarra se funden, quedando a su vez aderezados por ácidos solos y algún que otro grito y onomatopeya al micro.
Suena “Rockin” y su nombre lo dice todo; una persistente guitarra que sirve de compenetración al resto de coordinados elementos de la banda, generando un divertido combo de swing con sabor sureño.
Sin tregua alguna escuchamos “Nervous”; un oscuro tema que nos seduce con voz ronca y melodías de soul electrizante.
También nos trasladan a Jamaica en éste viaje espacial, regalándonos ska añejo, de raíz, bien cercano al rythm&blues primigenio y totalmente integrado con la música negra que propone la banda.
A continuación con su “Crazy rumba”, continúan jugueteando con todo tipo de géneros bailables con mucha actitud y gracia; dando paso a su aclamado single “Big Chef” con el que abren su siete pulgadas y muestran sus virtudes haciendo explotar su exótico rythm&blues, configurando ese tema directo y redondo que cautiva a todo ser viviente desde su primera escucha.
Sin cesar el ritmo primitivo de la batería, proceden con el apresurado “Brownie” con base caribeña, más mambo y maracas; un Pérez Prado con aires british, pura delicia.
El disco sigue rodando y escuchamos “Hoodoo”; noctámbulo blues callejero, con un estremecedor saxo y mucha seducción por parte de todos los instrumentos.
Sin tregua entra muy oportuna «Tell me pretty baby», versión del clásico de Screamin’ Joe Neal.
La melodía vuelve a agitar al personal en forma de rocanrol; causando palmas, movimientos de cabeza y twist en los pies; un eficaz pentagrama que da paso a un brillante homenaje a Freddy King, con la cálida y sucia voz que caracteriza la veracidad del vocalista.
“Keep your hands off my pocket” sigue meneando nuestros pies, con mucha frescura y algún que otro grito que bien podría haber salido de las entrañas de Ray Charles, Gino Washington o cualquier alma desgarradora de los 50’s americanos.

Continuando con la transición de su Space Mambo proceden con “Jambalaya”, un tema con el que siguen indagando por los caminos más selváticos del swing.
Sacan a relucir también su vena más blusera tomando prestado el clásico “Dimples” de John Lee Hooker. Ya versioneada por bandas como los Animals y tratada esta vez por los Limboos con gran respeto y matices propios.
Y qué mejor para decir adiós que un éxito garantizado, el “Manisero” de Antonio Machín…¡a sus pies!
Como no podía ser de otro modo, el público se pronuncia a silbidos con ganas de más y los músicos retoman el escenario con más munición, dejándonos definitivamente más que satisfechos y despidiéndose de nuevo con el tema instrumental que da nombre a su magistral álbum “Space Mambo”.
Y es que, éstos chicos tienen swing, tienen soul y mucho salero.
Hemos recorrido mucho esta noche y sobra la enumeración de influencias que con tanto gusto y saber hacer compagina la banda. Lo que no podemos negar es que han logrado un sonido muy propio y transparente, infinitamente sabroso; rico en matices que con cada tema evidencian su experiencia y potencial musical, con mucha magia y recursos que los convierten en una banda convincente y divertida.
Un enorme gusto y ¡ganas de volver a disfrutarlos muy pronto!
(en el Surforama estarán de vuelta)
¡Mambo!

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VikPamNoxhttp://www.facebook.com/VikPamNox2
Fotógrafo, cronista y ser humano. Beer Brother a tiempo parcial y pastor a tiempo total de la Primera Iglesia Presleyteriana de L'Eliana. Comprador y coleccionista compulsivo de discos. Enfermedad pura. Rock 'n' Grohl.
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