Foto: Paula (Crazy Minds)
El de anoche en la Riviera era un concierto especial para mi por varias razones, porque era en una ciudad a la que hacía tiempo que no iba, porque era en una sala de la que guardaba el gratisimo recuerdo de haber disfrutado allí de una de las mejores noches musicales que recuerdo con los Kaiser Chiefs teloneando a Franz Ferdinand en el primer concierto (de los cuatro a los que he asistido) que vi de los escoceses y sobretodo, porque era Noel Gallagher, uno de mis grandes ídolos y es que creo que Oasis fueron la primera banda en protagonizar una semana temática en La Gramola y eso lo dice todo.
De los teloneros, Cesar and Parker poco puedo decir ya que llegué a la sala cuando estaban terminando y es que el de anoche fue el concierto mas madrugador al que he asistido, de ocho de la tarde a once menos cuarto de la noche. No los conocía pero si que me llamaron la atención en algún tema, aunque creo que pecaron un poco de versatilidad y es que tocaron varios estilos musicales, al menos en los últimos temas que es cuando pude verles yo. El 27 de diciembre actuarán en la sala Moby Dick.
Noel aparecía en el escenario a las nueve en punto tras unos cuantos minutos musicales con un remix bastante curioso formado por varios samplers de canciones de su disco. Y curiosamente el concierto arrancó con It’s Good to be free, un tema de Oasis. Tras el espectacular inicio de la noche se produjo uno de los contratiempos de la noche y es que, pese a dar un gran concierto, quedó en evidencia la falta de rodaje de la banda a lo largo del concierto con varios errores técnicos por parte del staff de Noel y el primero ocurrió en el segundo tema con un fallo de afinación en la guitarra. Se fueron sucediendo los temas de ese primer gran disco con una (en mi caso inesperada al menos en la medida en que sucedió) implicación del publico que coreó cada una de las canciones, así se sucedieron Everybody’s on the run, Dream On, If I had a gun, The death of you and me…
Hasta que llegó la primera parada al pasado (aparte del inicio del que hablábamos antes) con dos de los grandes clásicos de Oasis como son Wonderwall (como era de esperar la mas aclamada de la noche ya que es un tema que va mas allá de ser un éxito, es el himno de una generación en la que por supuesto me incluyo) y Supersonic.
Volvíamos al presente con mi preferida del disco (i Wanna live in a dream in my) record machine y con una dedicatoria del vocalista a uno de los grandes ausentes de la noche (y es que Noel declaró hace tiempo que le encantaría que fuera al concierto), el entrenador de la noche, José Mourinho, que a esa misma hora se encontraba en el Bernabéu dirigiendo a su equipo que por aquel entonces ya goleaba al Atlético de Madrid. La canción que tuvo a bien dedicarle fue otro de los grandes éxitos del disco, Aka What a life. No fue la única dedicatoria de la noche ya que le dedicó dos temas a dos de las fans de la primera fila: Paula, una chica que colabora en una de nuestras «webs hermanas», Crazy Minds a la que dedicó uno de los bises, Little by little con un muy cariñoso «this one is for you. You’re my favourite» (si mi memoria no me engaña) y The death of you and me a Haydee (señalandola con el dedo y con un inaudible pero entendible en sus labios «for you»), una asidua de los conciertos en Valencia con la que he coincidido en varias ocasiones. Con ambas tuve la suerte de hablar después del concierto (además de con Jorge, el administrador de la web Crazy minds y con Lourdes, colaboradora de la web y compañera de fatigas jaja) y es que Paula y Haydee se ganaron las dedicatorias ya que fueron unas de las grandes madrugadoras de la velada para conseguir esa ansiada primera fila.
Tras dos temas más del disco, Soldier boys and jesus freaks y Aka broken arrow, con otros dos tema de la ultima etapa de Oasis en medio, Half The world away y Mucky fingers, llegaba el momento de ir a tomarse una cervecita para rematar la faena con un triplete formado por tres temas de los suyos (además de estar compuestos por el, con Oasis los cantaba él), Little by Little, The importance of being idle y como no, Don’t look back in anger, momento en el que a un servidor se le cayó alguna justificada lagrima.
Una gran noche en la que el mayor de los Gallagher dejó claro que, aunque no le guste esto de ser un frontman, su futuro está más que garantizado.
Parece que en menos de un año podremos disfrutar del segundo trabajo de Noel.
Cruzamos los dedos para que así sea y para poder volver a disfrutarlo en directo.
Gracias al usuario/a de youtube mukif0 por los videos que hizo y que hemos tomado prestados y a los amiguetes de Crazy Minds por cedernos la foto.
