La 1a edición de un festival suele presentarse con ciertas dudas por parte del público, y con grandes expectativas en pasarlo bien y disfrutar de la música en directo. En el caso del Cooltural Fest no fue una excepción. Las expectativas eran muy altas gracias en gran parte al cartel, y así lo confirmó la organización con el anuncio de sould out para la jornada del sábado a varias semanas del festival. Más dudas ofrecía el horario de los conciertos, puesto que el festival se llevaba a cabo desde la noche del viernes hasta la tarde del domingo prácticamente sin descanso, y en tres escenarios diferentes: un escenario principal en el propio recinto festivalero para los conciertos de las noches del viernes y sábado, un escenario llamado acústico-playa en una pequeña carpa en el paseo marítimo para las mañanas del sábado y domingo, y un escenario en el centro de la ciudad para las tardes del sábado y domingo.
Con todo esto, el Cooltural Fest se celebró los días 17, 18 y 19 de agosto, en la ciudad de Almería, con una media de 8.500 asistentes en el escenario principal, con unas instalaciones más que dignas, una zona vip con vistas excelentes al escenario principal y un equipo de sonido sin nada que reprochar. El horario y las distancias entre los escenarios, que requerían de transporte público, prácticamente imposibilitaron disfrutar de todos los conciertos, aunque los almerienses de cada zona y algunos valientes coolters, entre los que nos incluimos, intentaron acudir a los máximos conciertos posibles, desafiando al cansancio y a la resaca. Así pues, lamentamos no poder incluir en este crónica a 3 de las 22 bandas que actuaron en el Cooltural Fest y pedimos disculpas por ello.
VIERNES 17
La jornada del viernes empezó puntual a las 21:00 en el escenario principal con MARBAN, el grupo ganador del concurso de bandas del festival. Los de Getxo se presentaron con una gran entrada de público, inimaginable para ser la primera actuación del festival. Una banda joven, con descaro por parte de Guillermo Marban, que hizo valer su voz y su actitud en el escenario.
Para el segundo concierto con SHINOVA, el recinto del festival rozaba el lleno absoluto. Los también vascos caldearon el ambiente con su último disco, que ya se escuchó el pasado verano en numerosos festivales estatales. Quizá fue la apuesta más comercial del festival y de un estilo más alejado del alternativo y más cerca del pop que suena en las cadenas radiofónicas para las grandes masas. Sonaron nuevas canciones que verán la luz en su próximo disco.
Con máxima puntualidad llegó el punto más álgido de esta primera jornada, con IVÁN FERREIRO. El publico se volcó con las canciones de su último disco “Casa” (Warner Music 2016). Rescató como es inevitable “Promesas Que No Valen Nada” que interpretó en solitario con los teclados, con el ya clásico final de “donde estabas entonces…” de la canción “Insurrección” de “El Último de la Fila” que gracias a las voces de sus seguidores, la interpretó entera. Como no, sonaron “El Equilibrio Es Imposible, “Años 80” y “Turnedo”. Más de una hora de concierto con un final que desgarró la parte más íntima y profunda de los presentes. Lástima que algunos de sus seguidores se quedaron sin disfrutar de este gran directo, al llegar con la hora justa y esperar en la cola demasiado tiempo para canjear sus entradas.
Turno para RUFUS T. FIREFLY, que aparecieron con una puesta en escena íntima. La banda de psicodelia formada por Víctor Cabezuelo y Julia Martín-Maestro se encuentran en el punto más dulce de su carrera, de ahí que sea uno de los grupos más demandados de los festivales estatales de este verano. A destacar canciones de su penúltimo disco “Magnolia” (Lago Naranja Records, 2017) como “Nebulosa Jade”, “Tsukamori”, “Pulp Fiction” o la propia “Magnolia”, y canciones de su recién disco Loto (Lago Naranja records, 2018) como “Final Fantasy” y la gran demandada “Demogorgon”.
En plena madrugada continuó el show con el concierto más loco de esta primera velada con SEXY ZEBRAS, el trío madrileño puso del revés al público con una dosis de rock sin pelos en la lengua, directo, fresco y desenfrenado. Una apuesta firme por el descaro. Sin duda alguna, el concierto de rock más visceral de la noche. A destacar canciones de su penúltimo álbum como “Búfalo Blanco” y de su último trabajo, como la impresionante “Mami”.
Llegó el momento de cerrar esta primera jornada con VARRY BRAVA, los murcianos presentaron su último disco “Furor” (Hook Ediciones Musicales, 2018) a altas horas de la madrugada, haciendo bailar a sus seguidores con canciones como “Playa” o “No gires”, cerrando una magnífica primera noche, con la sensación de que estábamos ante un festival consagrado, con un lleno absoluto y prácticamente nada que reprochar, quizás, más personal en las barras y más puntos de wc para el aforo presente.
SÁBADO 18
El segundo día del festival empezó con un poco de retraso a eso de las 11:30 de la mañana, con mucho sueño y algo de resaca, en el escenario acústico-playa situado en una carpa a poquísimos metros de la playa de Almería. El césped invitó a tumbarse y descalzarse a la mayoría de los valientes que se presentaron, que no fueron pocos al principio y muchísimos al final.
El primer concierto acústico fue para CHICA SOBRESALTO, uno de los grandes descubrimientos del festival. Destacó su sencillez para hacer reír al público entre canción y canción, y como no su controlada voz y magníficas canciones que tratan de vivencias propias. Exquisito momento el que nos regaló la pamplonica con canciones como “Navegantes” o “Chico Efervescente”.
Le siguió MAGA, con la carpa hasta los topes, ya todos calzados y derechos para que pudieran caber todos los allí presentes baja la carpa que amortiguaba un sol de justicia. Se presentó Miguel Rivera con su inseparable guitarra y su voz tan característica, acompañado de teclados, voces y guitarra. A destacar canciones como “Agosto Esquimal” o “Diecinueve”, con la que acabaron su concierto.
La última actuación en el escenario acústico-playa estaba reservada para NUNATAK, que se presentó con la banda al completo, aunque respetando el formato acústico. Presentaron su último trabajo “Nunatak y el tiempo de los valientes” (Warner Music, 2018), con una solvencia digna de mencionar dado el formato musical, resaltando en consecuencia sus melodías y voces acompañantes. Un regalo para los oídos. La conexión entre grupo y público fue palpable hasta el punto en que se bajaron del escenario a interpretar junto a ellos una de sus canciones.
A la misma hora que Nunatak, a las 13.30 empezaron los conciertos en el escenario del centro de la ciudad con las bandas LOUDLY y AURORA AND THE BETRAYERS, los cuales no pudimos asistir al solaparse el primero y por una parada necesaria con el segundo.
La última actuación en el escenario del centro-ciudad fue para KITAI, el infierno transformado en grupo musical. Un cóctel explosivo formado por una voz al más puro estilo De la Rocha, una fuerza desmesurada de rock y una puesta en escena que hizo volar a los asistentes.
Ya en el recinto del festival, a las 21:00 empezó puntual CARMEN BOZA, con otra vez, un aforo inusual de buenas a primeras, lo que presagiaba que al recinto le quedaba poco tiempo para llenarse de los 9.000 “coolters” que asistieron en esta segunda velada. La gaditana se presentó con toda la banda al completo, y se mostró en el escenario como pez en el agua. Cuando un artista lo pasa bien se refleja en su mirada y sus gestos, y Carmen Boza es una de ellas. Se nota que es feliz en el escenario.
Seguidamente tuvo lugar uno de los conciertos más significativos del festival, con los almerienses NIXON, que ejercieron de anfitriones. Con más ilusión de lo habitual presentaron su disco “Utopía” (El Dromedario Records, 2018) con el que han rodado en más de un festival veraniego. Hubo tiempo para la sorpresa incluso para presenciar una pedida de mano en el mismo escenario. A destacar canciones como “Gravitacional” y la propia “Utopía” y un final apoteósico con el equipo de management del festival en el escenario, saltando y soltando los nervios y la tensión que suponemos que se deben de pasar en una primera edición.
La tercera actuación de la noche fue para el catalán CARLOS SADNESS. Un concierto del que se espera que se abra la lata de la fiesta y el baile, y así fue. Los ritmos y la inusual voz de Carlos Sadness no dan para disfrutar del puro talento musical, aunque sí para disfrutar del buen rollo y de un pop tropical al que su imagen en el escenario le viene como anillo al dedo. El respetable público lo disfrutó como nunca, y al fin y al cabo, de eso es de lo que se trata.
Llegó el turno de los veteranos SIDONIE. Veinte años sobre los escenarios son los que llevan a sus espaldas, aunque pocos lo dirían, pues se han ido adaptado a la demanda del respetable durante todos estos años de una manera magnífica. Empezaron con canciones de otros tiempos como “Feelin Down” o “Fascinado”, con unas voces un tanto sucias en los agudos a consecuencia de demasiadas horas en el escenario en tan pocas horas. Sonaron “Nuestro Baile del Viernes” , “El Incendio” y “Está En Mi Garganta”, pero el concierto poco apoco tomó el rumbo de la demanda con las canciones más actuales y con ello el show que Marc Ros desata en forma de baile, provocación y exhibicionismo. También sonaron “El Peor Grupo Del Mundo”, “Un Día De Mierda” con baño de masas incluido, “Estáis Aquí”, “Carreteras Infinitas” y “No Se Dibujar Un Perro” con el esperado cartel en modo de subtítulo.
Entrando en la madrugada se presentaron IZAL, con el recinto abarrotado y miles de seguidores esperando el momento. Si hay una banda que sabe combinar talento musical y los bailes son ellos, aunque el estilo esté demasiado cerca de alejarse de lo meramente alternativo y más cerca del pop comercial para grandes masas, al que podríamos denominar como nuevo indie. La presencia de Mikel Izal en el escenario provocó la locura en miles de fans que se desgallitaron a primera fila con “Autoterapia” y “Copacabana”, y con todo el repaso a sus grandes éxitos como “Qué Bien”, “El Baile” o “Agujeros de Gusano”.
El último concierto en el escenario principal del recinto fue para LA M.O.D.A., La banda de folk está siendo uno de los platos fuertes de varios festivales estatales. La voz forzada y el estilo folk bailable sonó para los más valientes que se quedaron para cerrar el escenario principal con la pareja más demanda a los platos, ELYELLA DJS, con una oferta de música ideal a altas horas de la madrugada. Destacar que han dado un paso que va más allá de la mera fiesta y el confeti, con sus propias producciones musicales.
DOMINGO 19
Empezó la tercera y última jornada del festival en el escenario acústico-playa con la valenciana MIREIA VILAR a las 11.00h. Con muy poco descanso y fieles a la música en directo, la carpa se volvió a llenar, aunque de momento uno se podía estirar en el césped y descalzarse, con los ritmos del pop electrónico de la banda, que presento su trabajo “Estado de Low”, aunque poco pudo esperar del público, ya sea porque no estaban del todo despiertos o por el inusual estilo musical que ofrece la banda a primera hora de la mañana.
Le siguió NEUMAN, que se presentó en solitario con su guitarra acústica y bombo a sus pies. Pronto se acabó el espacio para tumbarse y el estar descalzado, para pasar a no poder ver el mismos césped de la gran cantidad de público presente. Sonaron sus “hits” más esperados como “By fear/Hi love”, “Hell”, “Tell You” y “Turn It” para el deleite de sus seguidores que corearon cada canción del murciano.
La última actuación del acústico-playa fue para VIVA SUECIA, que se presentaron al completo y respetando el formato acústico. La carpa se quedó demasiado pequeña para el evento, puesto que sin lugar a dudas, hubieran podido ser cabeza de cartel para el escenario principal de éste y de cualquier festival de bandas nacionales. Arrancaron con “Acabaremos Muriendo en Ello” y siguieron con temas como “Nunca estamos Solos” y la esperada “El Nudo y la Esperanza”. No había suficiente toldo en la carpa para proteger del sol a todos los presentes, pues nadie se quiso perder a uno de los grupos más de moda del momento. Siguieron con temas como “A Dónde Ir”, y “Palos y Piedras” para acabar con un final apoteósico con “Permiso o Perdón” y “Bien por Ti”.
En el escenario del centro de la ciudad, la banda valenciana BADLANDS, maravilló bajo la carpa repleta de público que sorprendió en cantidad y variedad, sobretodo por ser las 14:00h de la tarde, aunque la ocasión bien lo merecía. Pues el público se entregó al country de la banda en el que destaca tanto la formación con banjo, violín y contrabajo, como la puesta en escena y a la gran voz de May Ibáñez. A destacar canciones como “As Long As”, “Colorado” “Call Me” y «Oh, Lord” con la que cerraron un concierto para enmarcar.
Seguidamente fue el turno de EL IMPERIO DEL PERRO, al que no pudimos presenciar por una parada tan necesaria como obligada para reponer la pocas fuerzas que nos quedaban tras 3 días de conciertos prácticamente ininterrumpidos.
Cerró el festival en el mismo escenario del centro de la ciudad el grupo DINERO, al que la prueba de sonido les costó quizá demasiado tiempo y casi acabó con la paciencia de la cara visible de la banda, Sean Marholm. El rock melódico de sus canciones inundó una carpa deseosa de fuerza y sonidos de metal que se entrelazaban a la perfección con las melodías y letras en castellano, del que pocas referencias podemos encontrar en el la escena actual. Una manera salvaje de cerrar el festival almeriense a lo grande.
Tras los tres días de música en directo, solo cabe felicitar al Cooltural Fest, en primer lugar por el trato que recibimos, en segundo por las instalaciones, y en tercer lugar por el trascurrir del propio festival sin ninguna incidencia, y como no, el éxito en el aforo. A nuestro parecer el Cooltural Fest rozó el sobresaliente en su primera edición. Puede que solo faltaron más personal en las barras y más accesos a los baños para el público, que ya intentaron solucionar en la segunda jornada al apreciar que el número de asistentes era estratosférico par tratarse de la primera edición. También en el escenario acústico-playa se vio desbordado de público en los últimos conciertos de cada mañana, aunque el objetivo se cumplió en creces, y más si nos paramos a pensar que se trató de su primera edición. Parece ser que el Cooltural Fest ha venido para quedarse muchas más ediciones, y esperamos que así sea. Felicidades!
Texto: Rafa Calatayud
