La música de Carla dal Forno es una auténtica delicia hecha para ser degustada por los paladares más exquisitos. Se trata de un pop sofisticado con muchos matices.
Cuando escuchamos el disco por primera vez tenemos la extraña sensación de estar transitando por lugares que ya hemos visitado. Todo nos resulta familiar, pero en cada pasaje encontramos detalles que llaman nuestra atención y que hacen de la música de Carla dal Forno, una música inconfundible y con fuerte personalidad propia.
Podemos encontrar la ensoñación de Cocteu Twins o Enya, la intensidad de Beach House, el romanticismo de Julia Holter, el agobio del trip-hop o la actitud del post-punk. Todo ello en un disco de 42 minutos con varios temas instrumentales, que hacen de este segundo trabajo de la australiana afincada en Londres, un paso más en la sólida trayectoria que comenzó en 2016, además de ser la primera referencia de su propio sello discográfico.
A finales de este mes de Enero vamos a tener la oportunidad de poder disfrutarla en directo en tres fechas en nuestr país. El 29, 30 y 31 de Enero estará actuando en Madrid, Barcelona y San Sebastián respectivamente.
Texto: Andrés Rojo
