El pasado sábado nos desplazamos hasta Gata de Gorgos, donde se celebra cada año el Festivalet Independent de Gata, también conocido como FIGA, que lleva (con esta) nueve ediciones apostando por la música en su más amplio sentido, abarcando todos los palos.
Este año no podía ser de otra forma, y se abría puntualmente el festival a las 20:00h con la actuación de Pupil·les Dilatives.
Seguidamente subían al escenario disfrazados de presos de Guantánamo los duros (en todos los sentidos) Back Storm.
Tras ellos, los sorprendentes (y sorprendentemente jóvenes) The Hoaxx, tres chavales ingleses que ya tocaron en la edición del 2013, que deben ser chavales que veranean en la zona y aprovechan para tocar (y tocar muy bien, por cierto). Intercalaron temas propios con versiones de Foo Fighters, Biffy Clyro o The Subways.
Después subían al escenario los madrileños Cómo Vivir en el Campo.
Seguidos de la actuación del cabeza de cartel del festival, el polifacético Ramírez (Tórtel, Coleccionistas…) en su vertiente en solitario, acompañado de una teclista-guitarrista-caja de ritmos, un bajista, y él mismo a la guitarra y voz.
Ya empezaba a haber más gente en los conciertos que en las barras, pese a que el alcohol no dejaba de fluir, y llegó la bomba con las dos siguientes actuaciones de la noche: primero con los setabenses Siberian Wolves, que venían de telonear esa misma semana a Fuzz en Madrid, y que dieron un concierto brutal.
Y después llegó el bailoteo, la fiesta, de mano de Thee Vertigos, que se hicieron de querer por la totalidad del público, que bailó temas de su próximo LP, así como de su primer EP «The Swirling Sounds of Thee Vertigos». ¡Hasta parte del sector femenino de la organización del festival subió a una parte del escenario a echarse unos bailes!
Una maravilla contagiosa.
Y tras ellos llegó el fin de fiesta con el concierto de El Lado Oscuro de la Broca, dando por finalizada la novena edición del Festivalet Independent de Gata, al que tenemos ya decidido volver el año que viene.
