Hacia las seis y media de la tarde abrió puertas este sábado la sala But de Madrid para dejar paso a una multitud que se agolpaba en la entrada para ver a uno de los grupos más punteros del metal moderno. Y es que, tras cuatro años sin pisar estas tierras y con un nuevo disco bajo el brazo, Trivium ha conseguido toda una legión de seguidores, algo que ha quedado más que demostrado con los tres Sold Outs en sus conciertos de la Península.
Una vez dentro, una ya casi abarrotada sala aguardaba a la aparición de la banda británica SHVPES, liderada por el hijo de Bruce Dickinson, Griffin. Para seros sincero, fui al concierto esperando entender por qué Kiichi y compañía habían elegido a esta banda tan novel para acompañarlos por Europa, ya que lo poco que había escuchado de ellos me había parecido un metalcore muy genérico, sin nada de especial. Sin embargo la respuesta no tardó en llegar, con la banda derrochando energía ya desde el primer momento con “False Teeth” y “State of Mind”. La cosa siguió mejorando incluso con las partes rapeadas de “Two Minutes of Hate”, para culminar con el tema homónimo “Shapes” en la que el mismo Griffin se unió al moshpit. Sin duda, SHVPES es una banda a la que habrá que seguir la pista en sus siguientes lanzamientos, pero sobretodo en sus próximos directos.
Tocaba ahora el turno de SikTh, una banda a la que muchos consideran como la precursora del Djent actual. En principio es una banda que no pegaba mucho este cartel, al ser de un estilo tan distinto, y esto se hizo notar a lo largo de todo su set. A pesar de tocar temazos como “Pussyfoot”, “Philistine Philosophies” o “Skies of Millenium Night”, el grupo no llegó a enganchar al público en prácticamente ningún momento, llegando hasta el punto de tener que pedir Mikee algo de movimiento en la pista.
Otro de mis problemas con la actuación fue el sonido, que estaba saturadísimo e impedía escuchar bien tanto el bajo como la guitarra, y si ya de por si los londinenses hacen música compleja, con esto se hacía bastante difícil discernir las distintas melodías superpuestas. Sin pena ni gloria, los chicos de la banda abandonaron el escenario para dar paso a los artistas principales, ahora si con una sala But llena hasta la bandera.
He de decir que desde hace bastante tiempo venía dudando de la capacidad de Heaffy para defenderse con los guturales, y que era un poco escéptico en ese sentido al asistir al concierto, además de que era la enésima vez que el grupo cambiaba de batería, reclutando ésta vez a Alex Bent (Battlecross), pero esas dudas quedaron más que satisfechas después de la actuación. Entre vítores que reclamaban a la banda, empezaban a sonar los primeros compases de “Run to the Hills”, que anunciaba la salida a escena de los de Florida, y que dejo paso a la intro “The End of Everything”, con la que el público ya sabía que esperar después: la brutal “Rain”, que empezó unos moshpits que no se desharían hasta el final del concierto. La siguieron la melódica “Forsake Not the Dream” siendo la oportunidad perfecta del respetable para corear los riffs y estribillos (cosa que tampoco paró en todo el concierto), y el ya clasicazo “Down From the Sky”, para dar paso a la primera representante del último LP, “Rise Above the Tides”, que si bien no era tan dura como las anteriores, fue cantada por todos los asistentes. Después de esto llego la más thrashera del set, y la única del “The Crusade”: “Entrance of the Conflagration” en la que tanto Matt como Corey se lucieron con sus respectivos solos. Por supuesto no podía faltar en este repertorio de ensueño mi favorita, “The Deceived”, con la que el nuevo, Bent, dejó claro que no iba a estar allí de adorno, golpeando la batería como alma que lleva el diablo. Para bajar un poco las pulsaciones al sofocado público, la siguiente en llegar fue “Dying in your Arms”, la balada por excelencia, aunque no por eso la gente dejó de montar pequeños pogos.
Poco iba a durar esta bajada, y es que venía “Strife” y “Dusk Dismantled”, siendo en esta última en la que el frontman pidió al público que gritase el estribillo a pleno pulmón, para según él, llegar a ser el mejor público de esta gira. Tocaba ahora otra del “Shogun”, “Throes of Perdition” donde de nuevo la sala se separó en dos para formar unos buenos circle pits. Prosiguieron con “Silence in the Snow”, ésta vez sin la intro que caracteriza varios de los temas de Trivium, y aprovechando la reedición de su primer álbum, sacaron a la luz “Pillars of Serpents”, que hizo gran contraste con la anterior, dejando a la vista el claro cambio de estilo que ha sufrido la banda a lo largo de toda su discografía. Seguíamos con los clasicazos y ahora era el turno de “A Gunshot to the Head of Trepidation” que llenó la sala de puños en alto tras los solos, y que dejaba paso a la última de su último disco, ya con un ritmo más suave, “Until the World Goes Cold”. Tampoco podía acabar el concierto sin “Pull Harder on the Strings of Your Martyr”, dejando en cinco la cuenta de temas del “Ascendancy”. Para terminar este concierto bestial, el grupo volcó toda la energía que le quedaba en “In Waves”, haciendo vibrar la sala entera. Tras una breve despedida, la banda abandonaba el escenario entre vítores y aplausos, dejando a los fans con una sensación agridulce entre felicidad y tristeza. A punto estuve de pagar el meet n’ greet, pero mi cartera no parecía opinar lo mismo, con dinero apenas para un Big Mac, pero bueno, me quedo con la alegría de haber visto a uno de los grupos que me iniciaron en el metal.
No tengo pega ninguna del directo de los estadounidenses, con unos coros dignos de admiración por parte del bajista Paolo y con la ligera ayuda extra con los guturales por parte de Beaulieu. Como mucho decir que grupos tan con una fanbase tan grande, deberían tocar en salas con un mayor aforo, ya que estuvimos como sardinas en lata allí dentro, por no hablar del calor, pero bueno, eso no depende del grupo sino de la promotora, y no soy yo quien para juzgar eso.
Dicho esto me despido, y como siempre, espero que os haya gustado. Nos vemos en tu mosh más próximo.
Texto: Ángel Martínez Palomares
Fotografías cortesía de todorock.net
